Síndrome de la boca ardiente
- On septiembre 16, 2019
Llega S. a mi consulta desesperada, molesta quejándose de una sensación de quemazón que le afecta mayoritariamente la lengua, pero me indica que también puede sentirla en el paladar, en los labios, en general, en toda la boca. Viene desesperada porque se nota la boca muy seca con un sabor metálico constante y que a veces le cambia el sabor de la comida.
Mi sospecha es que S. sufre un síndrome de boca ardiente con síntomas que pueden aparecer y desaparecer por períodos que pueden durar días, meses o años, el síndrome de boca ardiente o SBA, se presenta con frecuencia en mujeres tras la menopausia, y tiene una causa desconocida, la aparición de los síntomas puede ser repentina, inmediata a cualquier cambio en la boca, o manifestarse poco a poco en el tiempo, hoy en día el SBA se puede clasificar en dos tipos: síndrome de boca ardiente primario, que tiene que ver con afectación de los nervios sensoriales de la boca y el síndrome de boca ardiente secundario, que puede estar relacionado con una enfermedad no diagnosticada, por ejemplo: sequedad de la boca (xerostomía), problemas con las glándulas salivales, efecto secundario a algunos tratamientos para el cáncer o consecuencia de algunos medicamentos que reducen el flujo salival, deficiencias nutricionales y el uso de dentaduras postizas sobre todo cuando no están bien adaptadas.
Lamentablemente, el síndrome de boca ardiente no tiene un tratamiento solido que haga certera la forma de combatirlo, su tratamiento va a ser sintomático, dependiendo de los síntomas que produzca. Entre las opciones terapéuticas más frecuentes contamos con sustitutos de la saliva, colutorios con lidocaína y últimamente descrito en la literatura Capsaicina, que es un analgésico que puede extraerse de algunos vegetales como el pimiento picante y Clonazepam, que es un anticonvulsivo que ha demostrado cierta eficacia en la reducción de los síntomas del síndrome de boca ardiente, además existen algunas medidas que pueden aliviar la sensación de sequedad bucal como por ejemplo, beber mucho líquido, evitar alimentos irritantes como el alcohol, las bebidas carbonatadas o ácidas, eliminar el consumo total de tabaco y los productos que contengan menta o canela.
Hoy en día el síndrome de boca ardiente es completamente desconocido y difícil de diagnosticar, ya que en la mayoría de los casos no suelen haber cambios visibles en la cavidad bucal, sin embargo, es muy común que uno de los síntomas del que mayormente se quejan los pacientes es justamente del sabor metálico y de segregar una salivación pastosa.
Sería interesante aumentar la investigación, para dar con una terapia efectiva que elimine las molestias que produce esta enfermedad, ya que tiene un impacto que deteriora en gran medida la calidad de vida de las personas que lo padecen.
Hoy en día S. está bajo control, pero hasta que no sepamos a ciencia cierta como tratar su problema es cuestión de tiempo de que aparezca otro episodio de la enfermedad, estamos pendientes y la controlamos constantemente, pero hay veces que el conocimiento no está tan desarrollado, para poder darle soluciones definitivas a nuestros pacientes, son momentos en el que tenemos que aprender a convivir con la impotencia.
Bibliografía
Feller , L; Fopurie, J.; Bouckaert, M.; Khammissa, R.A.G.; Ballyram, R.; Lemmer, J. (2017). “Burning mouth Syndrome: Aetiopathogenesis and principles of management”