Para los padres, inculcar una rutina de lavado de dientes e implantar una higiene diaria en sus hijos no siempre es una tarea sencilla, ni en muchos casos efectiva.

Por ese motivo, ante una ineficaz higiene dental durante los primeros años de vida surgen en la boca de los más peques algunas leves incidencias que, en manos de un profesional con los conocimientos adecuados, pueden solucionarse sin muchas complicaciones.

Algunos de los problemas dentales más vistos durante nuestros años en la clínica son:

• Maloclusión: es la incorrecta alineación de los dientes. El paciente presenta una diferencia de tamaño entre mandíbulas o entre mandíbula y diente.
• Caries del biberón: Es un tipo de caries que suele aparecer en bebés y actúa de forma agresiva en la dentición temporal.
• Chuparse los dedos puede causar una alteración de los dientes e incluso del paladar.
• Pérdida temprana de dientes: Los dientes naturales que rodean el área pueden desplazarse hacia el espacio creado por el diente perdido y esto cree una estructura inadecuada.
• El bruxismo, también conocido como rechinar de dientes, es bastante común en los niños.
• Mal aliento: Otro problema dental es la enfermedad de las encías en los niños pequeños que puede solucionarse con limpiezas dentales o una correcta higiene bucal.

1 de cada 4 niños no ha visitado el dentista este año

Enero es el mes ideal para que los pequeños de la casa pasen por el chequeo y el control típico que se realiza en una revisión bucodental, con el fin de avistar posibles problemas surgidos en meses anteriores y prevenir males mayores en el futuro.

Sin embargo, según el Consejo General de Dentistas de España, casi el 30% de los niños españoles no han acudido a su dentista de confianza en el último año. Esto supone la desprotección de su salud bucodental y un peligro en la formación de la dentición permanente que se desarrolla entre los 6 y 12 años.

Conviene desterrar el mito de que no es necesario tratar los dientes de leche porque estos van a caerse en breve. Exponer a un niño a pasar sus primeros años sin visitar al dentista puede ocasionar infecciones (flemones) y otras afecciones derivadas.

Tan importante es a los 3 como a los 80 años, ¡la salud dental no tiene edad!